este consumidor de energía vital inmenso es el protocolo que nuestro atareado cerebro se impone allá por la noche y a veces de día para poder recordar en orden las cosas que acontecieron.
pequeño mecanismo de supervivencia en este desaforado sinparar de sensaciones contrapuestas...
viene arropado por la fatiga... contable ceñuda de nuestro esfuerzo...se apropia de los espacios callados y de los rincones tiernos para divagar...
comer bien para soñar dulce
querer bien para soñar grande
amar del todo para soñar con el mismísimo cielo
de cada sueño se suelen tomar más decisiones que de las reflexiones... de cada sueño a veces se construyen más realidades que de lo tangible...
hace años que confundo los límites caballero...vivo y sueño...sueño y vivo... toco y creo que no es real...luego huelo y me asusto por lo cercano...
el otoño en cascada hacia el frío y la languidez desdibuja estos contornos...
musica de fondo, un abrazo denso y a dormirr...
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