cada vez que forzamos este depósito, sus paredes se ensanchan sin remedio y así cada día nuestras tragaderas se hacen más grandes y nuestra pachorra (que es la vía de escape de la densidad) más exasperante...pero la máquina humana es así, líquida, autofuncionante y autorregulable con infinitud de orificios por donde exhalar venenos, mentiras y dolores de coco...cuando la densidad de lo que percibimos y pensamos se mezcla con el miedo, se transforma en una sustancia inestable, gris y fétida que puede explotar en cualquier meneo, o con una chispica de mala leche... entonces, sólo ciertos remedios como la música, el aire fresco, o la risa de lo absurdo neutralizan para nuestro bien esta trampa de la existencia y petardeando, pum pum repumpum, pum pum, nuestra moto recupera la fuerza pa seguir subiendo la cuesta, que cuesta ,lo que cuesta... sin más problemas y uno se puede girar mientras le da puño a la máquina y soltar aquello de "a tomar por c ..., bicicleta! que me compré una moto!"
lunes, mayo 26, 2008
densitómetro
la densidad es uno de los parámetros más elocuentes de nuestro devenir...entre momento y momento , al cerrar los ojos , cuando se agolpan ideas, visiones y retazos de sensaciones en la misma habitación que nuestras vivencias absortas y alejadas y al mismo tiempo que mantenemos una conversación, miramos con el rabillo del ojo y notamos el resplandor de los fantasmas que nos persiguen, al mismo tiempo, nuestro nivel de densidad se acerca a la masa crítica...
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